Los adolescentes varones presentan una mayor mortalidad por lesiones no intencionadas y violencia interpersonal
Un nuevo estudio sobre la igualdad de género en materia de salud y bienestar en la región de Asia-Pacífico pide que se preste más atención al exceso de mortalidad y a los riesgos para la salud que sufren los niños en los primeros 20 años de vida.
Según el estudio, publicado el mes pasado en la revista The Lancet Global Health, los ODS han aportado una atención justificada a la salud sexual y reproductiva de las niñas y a la eliminación de las prácticas nocivas; sin embargo, es necesario prestar más atención a los adolescentes, así como a los efectos de las normas de género nocivas en los niños.
El estudio señala que "las normas de género varían según los contextos socioculturales" en Asia-Pacífico. Pero en toda la región, los sistemas patriarcales refuerzan las normas de género "asignando mayor estatus y poder a los niños que a las niñas", y "premian las construcciones hegemónicas (dominantes) de la masculinidad". Todo ello "contribuye a que los chicos asuman riesgos y se expongan a la violencia", lo que se traduce en una mayor incidencia de lesiones y muertes.
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"Los adolescentes varones presentan una mortalidad sustancialmente mayor por lesiones no intencionadas, violencia interpersonal y alcohol y otras drogas, y una mayor prevalencia de consumo nocivo de alcohol y tabaco", señala el estudio. "En todos los países de Asia meridional, excepto en algunos (Bangladesh, India y Pakistán), los varones también presentaban tasas de suicidio sustancialmente mayores que sus homólogas femeninas".
Aunque las tasas de participación y finalización de la enseñanza secundaria superior eran similares para los chicos y las chicas en la mayoría de los países, los chicos tenían más probabilidades de no estar escolarizados en varios países de Asia oriental y sudoriental y del Pacífico, y tenían más probabilidades de estar involucrados en el trabajo infantil y en trabajos peligrosos".
El estudio
El estudio señalaba además que la pubertad está marcada por la "intensificación de la socialización de género", durante la cual "la identidad, los roles y las normas de género divergen fuertemente" y se "consolidan durante la adolescencia" con "consecuencias para la salud" que se extienden a la edad adulta y a la siguiente generación.
La preferencia por el hijo - evidente en las proporciones esperadas de sexo masculino y femenino al nacer en India, Vietnam y China, que sugieren el recurso a la determinación prenatal del sexo y al aborto selectivo por sexo - se sugiere como la causa de la mortalidad esperada entre las niñas en algunas naciones del sur de Asia y del Pacífico.
Sin embargo, los avances logrados en materia de mortalidad infantil, desnutrición y educación primaria se reparten mayoritariamente entre los niños y las niñas de esta región.
Sin embargo, a pesar de la paridad educativa en muchos países, las niñas no pasan a la formación continua o al empleo al mismo ritmo que los niños. "Es probable que el trabajo doméstico no remunerado, la paternidad temprana y las responsabilidades de cuidado contribuyan de forma importante al desempleo de las niñas" y las mantengan confinadas a los roles tradicionales de género.
Según los investigadores, las desventajas que experimentan las adolescentes en materia de salud sexual y reproductiva, sobre todo en los países del sur de Asia y del Pacífico, son las altas tasas de matrimonio infantil (en Afganistán, Bangladesh y Nepal el 30%) y el mayor número de mujeres que se casan antes de los 18 años, la fecundidad (65 y más nacidos vivos por cada 1.000 niñas en Afganistán Bangladesh, Laos y Nepal) y la violencia de pareja (más del 20% en Afganistán, Myanmar, Pakistán y Timor Leste).
Peter Azzopardi, autor correspondiente del estudio y profesor asociado del Grupo Global de Salud de los Adolescentes, del Instituto Burnet, en Melbourne, Australia, dice a SciDev.Net que el análisis también pone de manifiesto "una variación regional y nacional sustancial en los impactos de la desigualdad de género, lo que subraya la necesidad de una medición, programación y política específicas para cada contexto".
Por ejemplo, explica Azzopardi, "el matrimonio infantil es comparativamente bajo en Asia Central, pero las adolescentes de esta región corren un riesgo excesivo de consumir alcohol en exceso en comparación con otros entornos".
"Estos resultados ponen de manifiesto la necesidad de invertir en esta ventana de desarrollo para garantizar la igualdad de género a lo largo de la vida", afirma.
Deepanjan Mitra, analista de salud social y médico nuclear afiliado a los Hospitales de la Ciudad del Norte, en Calcuta, India, dice a SciDev. Net que los resultados del estudio pueden ser utilizados para generar conciencia pública por parte de los gobiernos y las organizaciones no gubernamentales, dirigida a las familias, más específicamente a las madres.
La necesidad de hacer que cada hogar [entienda la desigualdad de género] debe ser el punto de apoyo de todos los esfuerzos sociales futuros".
Deepanjan Mitra, analista de salud social y médico de medicina nuclear, North City Hospitals
Anish Ray, pediatra del Cook Children's Medical Center de Texas (EE.UU.), está de acuerdo con Mitra. Sin embargo, añade: "Creo que el mayor impacto para abordar esta desigualdad sería a través de la mejora de los niveles de educación, ya que es probable que conduzca a una mayor independencia, especialmente financiera (para las mujeres)."
"También hay que tener en cuenta que disparidades de esta naturaleza y magnitud no pueden superarse de la noche a la mañana, sino que requieren esfuerzos gubernamentales constantes", dice a SciDev.Net.