Los varones con testículos no descendidos pueden tener más riesgo de cáncer testicular e infertilidad en la edad adulta
Revisado por Alina Shrourou, licenciada en ciencias (editora) 29 ago 2018
Dirigido por investigadores de la Universidad de Sydney y publicado hoy en The Lancet Child & Adolescent Health, se trata del primer estudio de cohortes basado en la población que evalúa tanto la fertilidad adulta como el riesgo de cáncer tras la corrección quirúrgica (orquidopexia) de testículos no descendidos en la primera infancia. La intervención traslada un testículo no descendido al escroto y lo fija allí de forma permanente.
"Además de un mayor riesgo de cáncer testicular, descubrimos que los varones con testículos no descendidos presentaban una disminución de la paternidad y un mayor uso de tecnologías de reproducción asistida para la infertilidad en etapas posteriores de la vida", afirmó la profesora Natasha Nassar, de la Universidad de Sídney y autora principal del estudio.
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"El estudio aporta nuevas pruebas que respaldan las directrices internacionales que recomiendan la cirugía antes de los 18 meses en los varones con testículos no descendidos para reducir el riesgo tanto de cáncer testicular como de infertilidad en etapas posteriores de la vida."
Pero el cumplimiento de estas directrices sigue siendo escaso: casi la mitad de los varones con testículos no descendidos en Australia y más de tres cuartas partes en todo el mundo son operados a los 18 meses, afirma el equipo de investigación de la Universidad de Sídney, la Universidad Curtin y el Instituto Telethon Kids.
"Antes de este estudio, no existía información basada en pruebas sobre el impacto de la cirugía precoz en el riesgo futuro de cáncer testicular e infertilidad en varones adultos", afirmó el director del estudio, el Dr. Francisco Schneuer, de la Universidad de Sídney.
"El diagnóstico precoz, el examen y seguimiento continuos por parte de los padres y los profesionales sanitarios y la derivación oportuna a cirugía de los varones con testículos no descendidos es importante para garantizar el cumplimiento de las directrices".
"La cirugía temprana puede reducir el riesgo de malignidad e infertilidad masculina y, en última instancia, tiene el potencial de reducir futuros trastornos reproductivos masculinos en la edad adulta".
Detalles del estudio
Se trata de un estudio de cohortes basado en la población de 350.835 varones nacidos en Australia Occidental entre 1970 y 1999. La cohorte fue seguida hasta 2016 mediante la vinculación a registros de datos de ingresos hospitalarios, defectos congénitos, cáncer y tecnologías de reproducción asistida.
Principales resultados
+ Los varones con testículos no descendidos tienen 2,4 veces más riesgo de padecer cáncer testicular en la edad adulta que los no afectados.
+ El riesgo de cáncer testicular aumentaba un 6 por ciento con cada incremento de 6 meses en la edad en el momento de la cirugía (orquidopexia).
+ Los varones con testículos no descendidos tenían un 20 por ciento menos de probabilidades de paternidad en la edad adulta en comparación con los varones no afectados, y tenían más del doble de probabilidades de utilizar tecnología de reproducción asistida para la infertilidad en la edad adulta.
Los trastornos reproductivos masculinos aumentan en todo el mundo
+ Los testículos no descendidos son la anomalía congénita reproductiva más frecuente en los varones. Afecta a uno de cada 100 niños y requiere cirugía.
+ El cáncer de testículo afecta a hombres jóvenes de entre 20 y 40 años, es el segundo cáncer más frecuente en varones jóvenes y, aunque poco frecuente, ha aumentado un 50 por ciento en los últimos 30 años
+ La infertilidad masculina es un reto importante, ya que entre el 5% y el 10% de los hombres de todo el mundo son infértiles.