Un estudio revela cómo la obesidad puede contribuir a la infertilidad masculina
Feb 7 2018
Un nuevo estudio arroja luz sobre cómo la obesidad puede contribuir a la infertilidad masculina. El estudio, publicado en la revista de libre acceso Frontiers in Physiology, señala que los hombres obesos presentan mayores niveles de marcadores inflamatorios en el líquido seminal y una menor calidad del esperma, factores ambos que se correlacionan con su índice de masa corporal (IMC). Los resultados sugieren que la inflamación crónica en los órganos reproductores masculinos explica la relación entre obesidad y menor fertilidad.
La obesidad es un importante problema sanitario mundial y va en aumento. Además de diversas enfermedades crónicas, como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares, la obesidad también está relacionada con la reducción de la calidad del esperma y la infertilidad masculina. Los científicos también han relacionado la obesidad con el aumento de la inflamación. Las personas obesas pueden experimentar inflamación crónica en diversos tejidos, y estudios anteriores demuestran que las células grasas pueden producir y liberar proteínas de señalización específicas que provocan respuestas inflamatorias.
La obesidad golpea por debajo del cinturón: Un estudio revela la relación entre la obesidad y la infertilidad masculina
Un estudio revela el mecanismo de la infertilidad masculina causada por una enfermedad autoinmune
Algunos estudios han relacionado la inflamación crónica con el deterioro de la producción y la función de los espermatozoides, pero se desconocía si la inflamación relacionada con la obesidad podía influir en la fertilidad. Investigadores chinos plantearon la hipótesis de que la inflamación crónica asociada a la obesidad podría afectar al tracto genital masculino, que incluye los órganos reproductores, entre ellos los testículos, lo que supondría un posible mecanismo para explicar la relación entre obesidad e infertilidad masculina.
Para investigarlo, los investigadores compararon el nivel de marcadores inflamatorios en los tractos genitales de ratones machos normales y de aquellos alimentados con una dieta rica en grasas para convertirse en obesos. Descubrieron que los ratones obesos mostraban cambios estructurales en los testículos y cambios en la expresión de las hormonas sexuales. Esto incluía una disminución de los niveles de testosterona, una hormona sexual que puede ayudar a mantener la barrera protectora sangre-testículos, un importante escudo que protege los delicados tejidos de los testículos de los componentes de la sangre. El equipo también observó un aumento de las proteínas inflamatorias testiculares en los ratones obesos. Esto incluía proteínas que, según estudios anteriores, pueden afectar a la función espermática y a las células de los testículos implicadas en la producción de esperma.
A continuación, el equipo de investigación analizó muestras de semen humano para determinar la calidad del esperma y los marcadores inflamatorios. Estas muestras procedían de 272 donantes: 82 con un peso saludable, 150 con sobrepeso y 40 obesos. Los niveles de proteínas inflamatorias aumentaron significativamente en los donantes obesos y con sobrepeso, y se correlacionaron con el IMC de los donantes. Del mismo modo, la concentración y la movilidad de los espermatozoides, dos indicadores importantes de la fertilidad, disminuyeron significativamente en los donantes con sobrepeso y obesidad, y ambas disminuyeron con el aumento del IMC.
Los resultados sugieren que la inflamación crónica causada por la obesidad puede dañar el aparato genital masculino y provocar una menor fertilidad, aunque se necesitan más estudios para confirmarlo. Los investigadores creen que la inflamación crónica relacionada con la obesidad puede causar anomalías en los espermatozoides y dañar la barrera sangre-testículos.
Además de aportar información sobre los mecanismos que relacionan la obesidad y la infertilidad, el estudio también podría contribuir a las terapias para mejorar la fertilidad masculina. Es probable que abordar la obesidad sea una buena estrategia, ya que también aporta toda una serie de beneficios adicionales para la salud.
"La obesidad es un problema grave en la sociedad moderna y tanto las tasas de obesidad como las de infertilidad masculina siguen aumentando", afirma Zhide Ding, de la Facultad de Medicina de la Universidad Jiao Tong de Shanghai (China) e investigador responsable del estudio. "Reducir el IMC es importante para mejorar la fertilidad masculina".
Otra opción podría ser desarrollar tratamientos específicos para reducir la inflamación crónica en el aparato genital masculino, ayudando a prevenir daños y a reducir la fertilidad.