Embarazo psicológico: ¿se contagia?
Para los expertos el embarazo psicológico sigue siendo una gran incógnita para la que no encuentran ninguna explicación científica. Aunque sus causas, vienen determinadas en la mayoría de los casos por factores emocionales, siguen sin encontrar una explicación lógica a este trastorno.
Es cierto que en los últimos años el número de embarazos psicológicos ha disminuido, entre otras razones, debido a las técnicas en reproducción asistida y a los avances médicos y tecnológicos que se han producido en este sentido, pero siguen existiendo casos en los que se producen.
Reloj biológico: ¿se contagia?
Embarazo psicológico: ¿por qué se produce?
Algunas mujeres se preguntan ¿el embarazo psicológico se contagia? Es cierto que una de las causas según los especialistas por las que se puede producir este trastorno es si una mujer tiene grandes deseos de ser madre y alguien de su entorno más cercano se queda embarazada. Pero esto no significa que el embarazo psicológico se contagie, de hecho, es muy difícil que suceda, ya que deben darse determinadas circunstancias emocionales.
En un embarazo psicológico, el poder que la mente ejerce sobre el cuerpo tiene un papel fundamental, ya que es el responsable de producir las reacciones psicosomáticas que dan lugar a los mismos síntomas que se producen cuando se tiene un embarazo real. Una mujer que sufre un embarazo psicológico, tiene muchos de los síntomas que podría tener una mujer embarazada, tales como ausencia de regla, náuseas, vómitos, falta de apetito…
Precisamente el hecho de que cada mujer reaccione de manera diferente ante las situaciones emocionales complejas, hace que el embarazo psicológico sea un trastorno muy difícil de contagiar. Los niveles de estrés y ansiedad no afectan igual a todas las personas, ni tampoco todas las mujeres afrontan de la misma manera las dificultades, como tener problemas para tener hijos. En cualquier caso, lo mejor es acudir a un psicólogo para intentar determinar cuáles son las causas por las que se ha producido.