¿La vasectomía modifica el microbioma del semen?
El microbioma está formado por microorganismos simbióticos, patógenos y comensales que habitan en el cuerpo humano y contribuyen a su estado de salud y enfermedad. Los recientes avances tecnológicos han ayudado a dilucidar las funciones metabólicas, los estados simbióticos y el modo de interacción de estos organismos bacterianos con las células del huésped.
Sólo en Estados Unidos, más de 500.000 hombres se someten cada año a una vasectomía, que modifica el pH, la viscosidad y los niveles de prostaglandinas del semen. Tras la vasectomía, el cambio en los niveles de prostaglandinas seminales podría inducir cambios en el microbioma seminal, lo que podría promover la inflamación y la autoinmunidad.
Una nueva investigación descubre el impacto del microbioma del semen en la fertilidad masculina
El microbioma del esperma, al descubierto gracias a la secuenciación del ARN
Estudio: Estudio piloto: Secuenciación de próxima generación del microbioma del semen en hombres vasectomizados frente a los no vasectomizados. Crédito de la imagen: Mayboon / Shutterstock.com
Antecedentes
Aunque anteriormente se consideraba que el semen era un fluido estéril, recientes estudios microscópicos lo han desmentido al demostrar la presencia de microbios independientes de la microbiota del tracto urinario inferior. Además de los estudios microscópicos, el desarrollo de métodos de detección microbiana, como la secuenciación de próxima generación (NGS), ha aumentado la investigación sobre el microbioma seminal.
Estudios anteriores han demostrado que Lactobacillus y Gardnerella son las dos bacterias más abundantes en el esperma de alta calidad, mientras que Prevotella se encuentra abundantemente en el esperma de baja calidad.
El microbioma seminal no sólo se ha relacionado con la fertilidad, sino también con la aparición de prostatitis y cáncer de próstata. Por ejemplo, la disbiosis del microbioma en la próstata provoca alteraciones metabólicas e inflamación sistémica que pueden causar cáncer. Del mismo modo, en el caso de la prostatitis crónica, se observó una reducción significativa de Lactobacillus iners en el semen.
Hay pocas pruebas relacionadas con los factores que modifican el microbioma seminal y su efecto en la salud del hombre. Además, no se ha estudiado el impacto de la disbiosis a largo plazo en el microbioma seminal en una población más amplia.
Sobre el estudio
Un reciente estudio de la revista European Urology Focus investiga las alteraciones del microbioma del semen antes y después del procedimiento de la vasectomía. Además, se elaboró el perfil del microbioma del semen de los hombres vasectomizados.
Este estudio prospectivo incluyó a 58 hombres ambulatorios agrupados en función de diversos tratamientos y procedimientos. El grupo 1 estaba formado por 22 hombres que se sometieron a una evaluación de la fertilidad y a los que se les encontró un semen normozoospérmico, definido por un recuento y una motilidad espermáticos normales.
El grupo 2 incluía a hombres que planeaban someterse a una vasectomía. Este grupo proporcionó muestras de semen antes y tres meses después del procedimiento.
El grupo 3 incluyó a hombres que se sometieron a un análisis de semen tres meses después de la vasectomía. En este estudio, la edad media del grupo no vasectomizado era de 37 años, y la del grupo vasectomizado era de 38 años.
Los autores obtuvieron los datos clínicos pertinentes de las historias clínicas de los participantes, incluido el uso reciente de antibióticos y las complicaciones posteriores a la vasectomía. Además, todas las muestras de semen se sometieron a la secuenciación del ácido ribonucleico 16S (ARNr) y se procesaron bioinformáticamente.
Resultados del estudio
Se obtuvieron un total de 76 muestras de semen de 58 participantes. Alrededor del 89% de la cohorte del estudio eran caucásicos y el 50% no eran hispanos. Ningún participante experimentó complicaciones intra o postoperatorias.
Se excluyeron del estudio las muestras de dos participantes porque no se detectaron microbios mediante NGS tanto en el periodo anterior a la vasectomía como en el posterior. Después de la vasectomía, se observó una disminución de Brevundimonas, Sphingomonas y Paracoccus, con un aumento de Corynebacterium.
Se analizaron los cambios en el microbioma genitourinario tras la vasectomía. Para ello, se observó un rico microbioma en el semen, con presencia dominante de Firmicutes, Bacteroidetes, Proteobacterias y Actinobacterias.
En comparación con las muestras posteriores a la vasectomía, las muestras anteriores a la vasectomía presentaban un mayor número de unidades taxonómicas operativas (OTU). Por lo tanto, una reducción de OTU en las muestras vasectomizadas representaba una falta de microbioma testicular/epididimario tras el procedimiento de la vasectomía.
Las muestras de semen vasectomizadas revelaron una diversidad a reducida y mostraron una alta posibilidad de falta de espermatozoides. Esto fue similar a la azoospermia no obstructiva (NOA); sin embargo, se requiere más investigación para dilucidar el mecanismo subyacente de esta condición.
No se observó ningún cambio significativo en la diversidad b en el grupo de la vasectomía, lo que indicaba que las comunidades del microbioma del semen seguían siendo similares tras la esterilización masculina.
En particular, la abundancia general de especies, géneros y filos fue comparable entre los grupos vasectomizados y no vasectomizados. En conjunto, estos resultados indican una tendencia a la disminución de la diversidad a y a la conservación de la diversidad b en los machos vasectomizados.
Aunque el análisis de la composición de los microbiomas con corrección de sesgo (ANCOM-BC) reveló una concentración diferente de algunos géneros y especies en las muestras vasectomizadas y no vasectomizadas, la prevalencia de estos géneros y especies fue significativamente baja en ambas muestras.
Conclusiones
El presente estudio proporcionó información sobre el entorno del microbioma antes y después de la vasectomía. Sin embargo, el papel y la abundancia de los patógenos individuales antes y después de la cirugía deben ser estudiados en el futuro.
Las limitaciones fundamentales de este estudio incluyen su pequeño tamaño de muestra y la escasa diversidad radical de la población estudiada, lo que limita la generalización de estos resultados. Por lo tanto, se necesitan futuros estudios longitudinales para minimizar el riesgo de una estimación sesgada y ayudar a evaluar los impactos a largo plazo del procedimiento de vasectomía.
Los autores tampoco eliminaron las bacterias uretrales, que pueden estar representadas en el microbioma del semen.