¿Puedo comer salmón durante el embarazo?

Cuando te enteras de que estás embarazada, puedes empezar a preguntarte qué alimentos son seguros y cuáles debes evitar. El pescado es especialmente complicado. Tiene muchos beneficios para la salud y ayuda al cerebro del bebé en crecimiento, pero también conlleva algunos peligros, como la contaminación por mercurio.

El salmón es una buena opción porque tiene un contenido de mercurio bastante bajo y no tiene un fuerte sabor a pescado que pueda desanimarte si tienes aversión a los alimentos durante el embarazo. Siempre que comas salmón cocido y limites su consumo total, este pescado es saludable y seguro durante el embarazo.

Comer salmón durante el embarazo

Comer de dos a tres raciones de salmón cocido a la semana es seguro y saludable durante el embarazo. "El salmón es una excelente fuente de DHA o ácidos grasos omega 3, que aportan muchos beneficios al desarrollo del feto y al embarazo", señala el Dr. Daniel Roshan, FACOG, FACS, ginecólogo de alto riesgo materno-fetal de Nueva York. "Estos beneficios incluyen un posible impacto positivo en el desarrollo neurológico del feto y del bebé, la reducción del parto prematuro, así como una posible disminución de la hipertensión inducida por el embarazo".

Rachel McBryan, dietista titulada de la Columbia Británica, añade: "El salmón está repleto de ácidos grasos omega-3, concretamente de dos tipos, el EPA y el DHA, que son extremadamente importantes para el desarrollo del cerebro y los ojos del feto durante el embarazo. "

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El salmón debe estar totalmente cocinado para ser seguro durante el embarazo. El Dr. Roshan señala: "El salmón ahumado y crudo no está totalmente cocinado y no debe consumirse durante el embarazo o la lactancia, ya que puede provocar una infección por listeria."

Cada embarazo es diferente. Asegúrate de consultar con un profesional sanitario sobre tus circunstancias si tienes alguna duda sobre el consumo de salmón durante el embarazo.

¿Es seguro para el bebé?

El salmón completamente cocinado es seguro para tu bebé, y tiene muchos beneficios. El salmón crudo o ahumado no se considera seguro a menos que esté enlatado y no necesite ser refrigerado después de abrirlo. Limitarse a dos o tres raciones por semana también protege al bebé contra la exposición al mercurio.

Beneficios del salmón durante el embarazo

El salmón tiene muchos beneficios para el feto porque es rico en ácido docosahexaenoico (DHA), un ácido graso omega-3. "Durante el embarazo, se produce un descenso natural del DHA, a menos que se añada a la dieta. Como resultado, sólo una cuarta parte de las mujeres embarazadas consumen el DHA adecuado para la salud de su hijo", señala McBryan.

El pescado es un excelente alimento para el embarazo porque aporta DHA, pero, por desgracia, algunos pescados no son seguros para comer cuando se está embarazada por su contenido en mercurio. Como el salmón tiene un bajo contenido en mercurio, puedes comerlo en abundancia sin preocuparte por este riesgo.

Reduce la depresión posparto

El quince por ciento de las nuevas madres experimentan depresión posparto (PPD), sentimientos de tristeza y angustia que interfieren con el funcionamiento diario durante el primer año después del parto. Las fluctuaciones hormonales desempeñan un papel en la DPP, y comer salmón puede ayudarte a evitarla. "El omega 3 [del salmón] puede... ayudar a la salud cerebral de la madre previniendo la depresión después del embarazo", explica McBryan.

Promueve el neurodesarrollo

El DHA es necesario para el crecimiento y el desarrollo del cerebro. "Se ha descubierto que las madres que consumían más de 12 onzas de pescado a la semana tenían hijos con puntuaciones de CI significativamente más altas que las que no lo hacían", dice McBryan. Un estudio descubrió que los bebés cuyas madres consumieron suficiente DHA durante el embarazo tenían mejores habilidades cognitivas al año de edad. La deficiencia de DHA también se ha relacionado con problemas de aprendizaje.

Reduce la hipertensión inducida por el embarazo

Se ha demostrado que comer pescado durante el embarazo reduce el riesgo de sufrir hipertensión. Esto es importante porque la hipertensión puede provocar preeclampsia, que es una enfermedad grave y potencialmente mortal durante el embarazo.

Reduce los partos prematuros

Asegurarse de comer suficiente marisco es una forma de reducir el riesgo de parto prematuro. El salmón es una buena opción porque se pueden consumir con seguridad de dos a tres raciones a la semana, a diferencia de otros tipos de pescado que deben limitarse más o evitarse por completo debido a su alto contenido en mercurio.

Precauciones de seguridad

Aunque el salmón es saludable y beneficioso para el cerebro en desarrollo de tu bebé, hay que tener en cuenta algunas precauciones. Es importante comer el salmón completamente cocido y limitar su consumo a dos o tres veces por semana.

Listeria

Evite el salmón crudo o ahumado en favor de platos totalmente cocinados para prevenir la listeria. La listeria es una infección que se puede contraer al consumir alimentos crudos, y las mujeres embarazadas se encuentran entre los grupos más susceptibles. Si una mujer embarazada contrae listeria, su bebé por nacer corre el riesgo de tener un parto prematuro, un aborto espontáneo, un parto de mortinato o una infección potencialmente mortal al nacer.

"La temperatura ideal a la que debe cocinarse el salmón es de 145 grados Fahrenheit para matar cualquier patógeno", aconseja McBryan. Se puede comer salmón ahumado cocinado en un plato como una cazuela o una pizza, así como salmón ahumado en lata que no requiere refrigeración.

Contenido de mercurio

Es muy importante vigilar la ingesta de mercurio durante el embarazo, ya que unos niveles elevados pueden provocar daños cerebrales y problemas de audición y visión en el bebé. Todos los pescados tienen alguna cantidad de mercurio, y aunque algunos tipos deben evitarse por completo durante el embarazo, el salmón sólo debe limitarse. Para mantener la ingesta de mercurio dentro de los límites de seguridad, limítese a dos o tres raciones de salmón y otros pescados con bajo contenido en mercurio a la semana.

Comer salmón durante el embarazo es una buena manera de obtener el DHA que tu bebé necesita para su cerebro en desarrollo. Es importante asegurarse de que el salmón esté completamente cocido para reducir el riesgo de contraer listeria. También debes vigilar tu consumo total de marisco para evitar consumir niveles peligrosos de mercurio.

Si te limitas a consumir de dos a tres raciones de salmón cocido a la semana, obtendrás los beneficios para ti y para tu bebé en crecimiento, al tiempo que te aseguras de que tu bebé esté seguro. Consulta siempre con un profesional sanitario la cantidad exacta de salmón que puedes consumir durante el embarazo o si tienes alguna duda sobre cómo prepararlo de forma segura.