Sangrado vaginal y coágulos durante el embarazo

El sangrado durante el embarazo es común, especialmente durante el primer trimestre. Por lo general, no es motivo de preocupación. Pero como el sangrado puede ser a veces un signo de algo serio, es importante conocer las posibles causas y consultar a tu médico para asegurarte de que tú y tu bebé estén sanos.

Hasta el 25% de las mujeres experimentan algún sangrado vaginal durante las primeras 12 semanas de embarazo. A menudo esto es normal y no es motivo de preocupación. Muchas mujeres que experimentan sangrado durante este tiempo continúan con embarazos normales y dan a luz a bebés sanos.

El manchado o sangrado ligero durante el embarazo generalmente no es preocupante. Pero el sangrado más abundante que empapa un salvaslip o toalla no es normal. Llama a tu médico de inmediato para informar cualquier sangrado que tengas durante el primer trimestre. Tu médico te ayudará a determinar la causa y guiará tus próximos pasos para mantenerte a ti y a tu bebé sanos.

Sangrado durante el embarazo

Flujo vaginal durante el embarazo

¿Qué causa el sangrado durante el primer trimestre?

Las posibles causas de sangrado en el primer trimestre incluyen:

Sangrado por implantación. Puedes experimentar un manchado normal dentro de los primeros 6-12 días después de concebir, a medida que el óvulo fertilizado se implanta en el revestimiento del útero. Algunas mujeres no se dan cuenta de que están embarazadas porque confunden este sangrado con un periodo ligero. Por lo general, el sangrado es muy ligero y dura desde unas pocas horas hasta unos días.

Aborto espontáneo. Dado que el aborto espontáneo es más común durante las primeras 12 semanas de embarazo, tiende a ser una de las mayores preocupaciones durante el primer trimestre. Sin embargo, el sangrado en el primer trimestre no significa necesariamente que hayas tenido un aborto espontáneo o que lo vayas a tener. Si se detecta un latido fetal mediante ecografía, tu riesgo de abortar es más bajo, según investigaciones.

Otros síntomas de aborto espontáneo incluyen calambres fuertes en la parte baja del abdomen y tejido que pasa a través de la vagina.

Embarazo ectópico. En un embarazo ectópico, el embrión fertilizado se implanta fuera del útero, generalmente en la trompa de Falopio. Si el embrión sigue creciendo, puede hacer que la trompa de Falopio se rompa, lo cual puede ser potencialmente mortal para la madre. Aunque el embarazo ectópico es potencialmente peligroso, solo ocurre en alrededor del 2% de los embarazos.

Otros síntomas de embarazo ectópico son calambres intensos o dolor en el abdomen bajo y mareos.

Embarazo molar. También llamado enfermedad trofoblástica gestacional, esta es una condición muy rara en la que tejido anormal crece dentro del útero en lugar de un bebé. En raras ocasiones, el tejido es canceroso y puede extenderse a otras partes del cuerpo.

Otros síntomas de embarazo molar son náuseas y vómitos severos. Tu abdomen también puede crecer muy rápido a medida que tu útero se expande.

Otras causas de sangrado en el embarazo temprano incluyen:

Cambios cervicales. Durante el embarazo, fluye sangre extra al cuello uterino. Tener relaciones sexuales o realizar una prueba de Papanicolaou, que causan contacto con el cuello uterino, pueden desencadenar sangrado. Este tipo de sangrado no es motivo de preocupación.

Infección. Cualquier infección del cuello uterino, vagina, o una infección de transmisión sexual (como clamidia, gonorrea o herpes) puede causar sangrado en el primer trimestre. Necesitarás tratamiento de tu médico si tienes una infección.

Tabaquismo. Fumar puede provocar sangrado anormal durante el embarazo. Habla con tu médico para obtener apoyo si estás embarazada y deseas dejar de fumar.

Hematoma subcoriónico. Esto ocurre cuando la sangre se acumula en el área donde se adhiere el saco amniótico de tu bebé a la pared uterina. Esta colección de sangre a menudo desaparece por sí sola sin ningún síntoma pero a veces puede causar un ligero sangrado.

Sangrado en el Segundo y Tercer Trimestre

El sangrado anormal en el embarazo tardío puede ser más grave porque puede señalar un problema contigo o con tu bebé. Llama a tu médico lo antes posible si experimentas cualquier tipo de sangrado en tu segundo o tercer trimestre.

¿Qué causa el sangrado en el segundo y tercer trimestres?

Las posibles causas de sangrado en el embarazo tardío incluyen:

Placenta previa. Esta condición ocurre cuando la placenta se sitúa baja en el útero y cubre parcial o completamente la abertura del canal de parto. La placenta previa es muy rara en el tercer trimestre tardío, ocurriendo en aproximadamente 1 de cada 200 embarazos. Un placenta previa que sangra, que puede ser indoloro, es una emergencia que requiere atención médica inmediata.

Desprendimiento de placenta. En aproximadamente el 1% de los embarazos, la placenta se separa de la pared del útero antes o durante el trabajo de parto, y la sangre se acumula entre la placenta y el útero. El desprendimiento de placenta puede ser muy peligroso tanto para la madre como para el bebé.

Otros signos y síntomas de desprendimiento de placenta son dolor abdominal, coágulos de sangre de la vagina, útero sensible y dolor en la espalda.

Ruptura uterina. En raras ocasiones, una cicatriz de una cesárea anterior puede desgarrarse durante el embarazo. La ruptura uterina puede ser mortal y requiere una cesárea de emergencia.

Otros síntomas de ruptura uterina son dolor y sensibilidad en el abdomen.

Vasa previa. En esta condición muy rara, los vasos sanguíneos del bebé en el cordón umbilical o en la placenta cruzan la abertura del canal de parto. La vasa previa puede ser muy peligrosa para el bebé porque los vasos sanguíneos pueden romperse, causando que el bebé sangre severamente y pierda oxígeno.

Otros signos de vasa previa incluyen un ritmo cardíaco fetal anormal y sangrado excesivo.

Parto prematuro. El sangrado vaginal tarde en el embarazo puede ser solo una señal de que tu cuerpo se está preparando para dar a luz. Unos días o semanas antes de que comience el parto, el tapón mucoso que cubre la abertura del útero saldrá por la vagina, y generalmente tendrá pequeñas cantidades de sangre (esto se conoce como "muestra sanguinolenta"). Si el sangrado y síntomas de parto comienzan antes de la semana 37 de embarazo, contacta a tu médico de inmediato porque podrías estar en trabajo de parto prematuro.

Otros síntomas de trabajo de parto prematuro incluyen contracciones, flujo vaginal, presión abdominal y dolor en la parte baja de la espalda.

Otras causas de sangrado en el embarazo tardío son:

• Lesión en el cuello uterino o vagina
• Pólipos
• Cáncer

Debido a que el sangrado vaginal en cualquier trimestre puede ser un signo de un problema, llama a tu médico. Usa una toalla sanitaria para que puedas llevar un control de cuánto estás sangrando, y anota el tipo de sangre (por ejemplo, rosa, marrón o roja; suave o llena de coágulos). Lleva cualquier tejido que pase a través de la vagina a tu médico para análisis. No uses un tampón ni tengas relaciones sexuales mientras estés sangrando.

Tu médico podría recomendarte que descanses tanto como puedas y evites hacer ejercicio y viajar.

Debes esperar recibir una ecografía para identificar cuál puede ser la causa subyacente de tu sangrado. Se suelen realizar ecografías vaginales y abdominales juntas como parte de una evaluación completa.

Sangrado abundante durante el embarazo.

El sangrado abundante durante el embarazo no es normal. Sabes que estás sangrando abundantemente si necesitas cambiar tu toalla sanitaria cada 1-2 horas o si pasas coágulos del tamaño de una moneda o más grandes. Llama a tu médico de inmediato si tienes sangrado abundante en cualquier momento durante el embarazo.

Cuándo ir a la sala de emergencias.

Ve a la sala de emergencias o llama al 911 de inmediato si tienes alguno de los siguientes síntomas, que podrían ser signos de un aborto espontáneo u otros problemas graves:

• Dolor intenso o calambres severos en la parte baja del abdomen
• Sangrado severo, con o sin dolor
• Secreción de la vagina que contiene tejido
• Mareos o desmayos
• Fiebre de 100.4 °F o más y/o escalofríos

Conclusiones

El sangrado durante el embarazo no siempre significa que haya un problema contigo o con tu bebé. El manchado o sangrado ligero durante el primer trimestre es a menudo normal y desaparece por sí solo. Sin embargo, el sangrado abundante con o sin otros síntomas puede ser un signo de un problema serio. Lleva un control del color, cantidad y duración del sangrado que experimentas. Llama a tu médico si experimentas sangrado en cualquier momento durante tu embarazo.

¿Cuánto sangrado es normal en el embarazo temprano?

El manchado o unas gotas de sangre que no empapan un salvaslip suelen ser normales en las primeras etapas del embarazo. Un sangrado ligero, que puede alarmarte, generalmente desaparece por sí solo y no es motivo de preocupación. Siempre contacta a tu médico si te preocupa la cantidad de sangrado vaginal que experimentas.

¿Es el sangrado durante el embarazo una emergencia?

A veces, pero no siempre. El sangrado puede ser un signo de una emergencia, especialmente si tienes otros síntomas como calambres abdominales, dolor, coágulos o tejido que pasa por la vagina, fiebre y mareos o desmayos. Llama al 911 o ve a la sala de emergencias si estás sangrando y tienes alguno de estos síntomas.

¿Puedes sangrar abundantemente y seguir embarazada?

Sí, puedes sangrar abundantemente y seguir embarazada. El sangrado abundante no siempre significa que has tenido un aborto espontáneo. Puede ser un signo de parto prematuro u otro problema serio que necesita atención médica inmediata para mantenerte a ti y a tu bebé sanos.

¿Puede el sangrado durante el embarazo afectar al bebé?

El sangrado durante el embarazo puede afectar al bebé dependiendo de la causa. Tu médico te examinará para averiguar la causa de tu sangrado y proporcionará la atención que es mejor para ti y tu bebé.

¿Puede el estrés causar sangrado vaginal?

Se necesita más investigación para decirlo con certeza. Pero el estrés durante el embarazo puede causar problemas como hipertensión, parto prematuro (nacido antes de las 37 semanas) o tener un bebé con bajo peso al nacer (menos de 5 libras, 8 onzas). Habla con tu médico si te sientes estresada. Manejar tu estrés durante el embarazo ayudará a que tú y tu bebé se mantengan sanos.