Cómo elegir la primera cuna de tu bebé

La llegada de un bebé implica hacer acopio de toda una serie de accesorios y muebles que inicialmente vas a necesitar para su cuidado. Entre ellos, la cuna ocupa el primer lugar de la lista, porque es algo de lo que no vas a poder prescindir.

Incluso aunque hayas planeado practicar colecho, es conveniente que tengas una cuna, concretamente, una cuna colecho. Como veremos más adelante, es más seguro que metiendo a tu peque en tu misma cama.

¿Qué has de tener en cuenta a la hora de comprar la primera cuna de tu bebé?

Elige una cuna de colecho si vas a dormir junto a tu bebé

Si ya conoces los beneficios del colecho en el desarrollo de los niños - mejor calidad del sueño, seguridad, autoestima, etc- y sus ventajas para los padres, quizás hayas decidido dormir junto a tu bebé, al menos, durante el primer año.

Aunque puede que lo más fácil y cómodo te parezca meter directamente a tu bebé en tu cama, con algún cojín de por medio para preservar su espacio, realmente no es la forma más apropiada de hacer colecho.

Según los expertos, lo recomendable es utilizar una cuna colecho, ya que, al ir unida a la cama de matrimonio con un lateral abierto, el bebé te sentirá igual de cerca, pero contará con su propio espacio y no correrá el peligro de sufrir asfixia o, incluso, aplastamiento.

Así pues la mejor opción, en caso de que duermas con tu bebé, es una cuna colecho para favorecer el descanso del recién nacido y garantizar su seguridad al mismo tiempo.

Somier regulable: adapta la altura al crecimiento de tu peque

Tanto si te decantas por una cuna de bebé como si lo haces por una cuna colecho, un detalle importante es el de las alturas a las que el somier se pueda ajustar.

Cuantas más opciones tengas para regular la altura del somier, mejor se adaptará la profundidad de la cuna al crecimiento de tu bebé y más fácil será unirla a tu cama si se trata de una cuna colecho.

Minicuna o moisés: valora si te merece la pena

En caso de que no vayas a hacer colecho, tienes dos opciones para que, durante los primeros meses de vida, tu bebé duerma con esa sensación de recogimiento y seguridad que tenía cuando estaba en el vientre materno:

  • Moisés: es un capazo  de mimbre, palma o materiales sintéticos, que puedes colocar bien sobre una superficie firme o bien sobre una estructura para moisés. Esta puede tener forma de tijera - es decir, plegable- o de balancín. 

La ventaja del moisés es que el capazo lo puedes llevar contigo a cualquier sitio, aunque solo te servirá durante los primeros cuatro meses desde el nacimiento.

  • Minicuna: es una cuna de tamaño pequeño, que podrás usar hasta que tu bebé tenga seis meses. La estructura de la minicuna la encontrarás en tres versiones diferentes: con patas, de tijera o de balancín.

Si ninguna de estas dos opciones te convence y prefieres pasar directamente a una cuna de bebé, un buen consejo para que tu bebé recién nacido duerma más resguardado es que utilices un cojín reductor dentro de la cuna. Los mejores son los desmontables, de forma que luego le puedas dar otros usos a sus dos piezas: el borde, como cojín de lactancia y la base, como cambiador.

 

Cuna de bebé: solo hasta los dos años

La cuna de bebé es la cuna convencional, con barandillas fijas y un tamaño adecuado para que tu peque la use desde el nacimiento hasta los dos años aproximadamente.

Es aconsejable que complementes la cuna con un colchón avanzado, transpirable y con propiedades antialérgicas. Hay modelos innovadores en el mercado que incluso incluyen tecnologías pensadas para evitar la muerte súbita y la plagiocefalia (síndrome de la cabeza plana).

Cuna convertible en cama: dos años más de vida útil

Por último, cabe mencionar un modelo de cuna, cuya principal ventaja es que tiene una vida útil más amplia que las cunas convencionales.

Se trata de las cunas convertibles, las cuales encontrarás en dos versiones principalmente:

  • 2x1: cuna de bebé que se puede convertir en cama infantil.
  • 3x1: cunas colecho convertible en cama. Es decir, puedes usarla como cuna convencional, como cuna colecho y como cama infantil.

Teniendo en cuenta toda esta información, elegir la primera cuna de tu bebé será más sencillo que si lo haces sin conocer todas las posibilidades que te ofrecen las tiendas especializadas dependiendo de tu necesidades y de la forma en que quieras criar a tu peque.

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