Problemas de fertilidad: mala alimentación
Las dietas sin control médico, los trastornos alimenticios o el sobrepeso y la obesidad son algunas de las razones por las que muchas mujeres (y también hombres) sufren problemas de fertilidad. La mala alimentación afecta al correcto funcionamiento del organismo y, por la tanto, también al de los órganos reproductivos, reduciendo las posibilidades de lograr un embarazo.
Para evitar los problemas de fertilidad por una mala alimentación es importante llevar una dieta sana y equilibrada rica todos los nutrientes necesarios que tu cuerpo necesita, incluidas las grasas. Aunque erróneamente se cree que son perjudiciales para la salud, en su justa medida y siempre sin abusar de ellas y evitando las grasas saturadas, son imprescindibles para el organismo.
Una mala alimentación puede reducir las posibilidades de quedarse embarazada
Una alimentación rica en vitaminas y proteínas, el mejor remedio para mejorar la fertilidad
Cuando en el organismo de una mujer faltan las grasas, su sistema hormonal se muestra más sensible y es más propenso a sufrir alteraciones desfavorables. Cuando esto ocurre, como por ejemplo en los casos de anorexia o bulimia, el funcionamiento de las hormonas se ve totalmente alterado, llegando incluso a producir falta de regla o anovulación. Muchas hormonas femeninas como por ejemplo la progesterona, se forma a partir de determinadas grasas como puede ser el colesterol.
Por otro lado, la obesidad o el sobrepeso también puede ser la causante de tus problemas de fertilidad por una mala alimentación ya que las personas que padecen este tipo de enfermedad, también suelen sufrir síndrome del ovario poliquístico, una de las causas más conocidas de esterilidad femenina que afecta a más número de mujeres.
Si quieres evitar los problemas de fertilidad por una mala alimentación, infórmate con tu médico de cuál es la dieta más recomendada para tu organismo en función de tus necesidades y de las características de tu cuerpo. Tal vez debas cambiar tus hábitos alimenticios para aumentar las posibilidades de quedar embarazada. No te olvides también de evitar la vida sedentaria y practicar deporte.