Razones por las que no provocarte un aborto
Cuando un aborto ser produce de forma voluntaria, es fundamental e imprescindible que la mujer sea atendida por un equipo médico de profesionales. Las principales razones por las que no debes provocarte un aborto en casa es que pones en grave riesgo tu salud, pudiendo llegar a provocarte una infección en el útero o en las trompas de falopio, hemorragias, infertilidad a largo plazo o incluso, la muerte.
Todos los abortos deben ser realizados por profesionales médicos, controlados seriamente, en condiciones totalmente asépticas y con instrumentos esterilizados. Cuando se practica un aborto de forma clandestina, se administra a las pacientes anestesia general sin ningún tipo de monitoreo o se utiliza instrumental quirúrgico que no está esterilizado y que puede provocar una hemorragia severa.
Razones por las que se produce un aborto
Razones por las que no beber si estás embarazada
La intervención para provocar un aborto va a depender del momento de la gestación en la que una mujer se encuentre. Recordemos que, en España, practicar un aborto sólo está permitido hasta la semana 14 y hasta la 22 cuando la vida de la mujer corre peligro. Cuando la gestación se encuentra en las primeras semanas, se puede provocar un aborto químico, es decir, aquel que se produce por una combinación de fármacos. Antes de las 12 semanas, el método más usado es el aborto quirúrgico que se produce por aspiración. Se succiona al feto, usando una jeringa manual o bomba eléctrica de aspiración. Cuando este método no es factible se usa el método de dilatación y raspado, pero se practica en muy pocas ocasiones ya que según la Organización Mundial de la Salud es peligroso.
Las secuelas de un aborto pueden durar meses o incluso años. Aunque depende de las causas que lo han provocado y de si es espontáneo o voluntario, al igual que el tratamiento posterior, los expertos recomiendan a las mujeres que quieren abortar que sea una decisión muy premeditada ya que puede desembocar en consecuencias negativas no sólo físicas, sino también psicológicas. Ésta es una de las razones por las que no debes provocarte un aborto, sino acudir a un especialista para realizar la intervención.