Qué lámpara elegir para el cuarto de los niños

Para muchos niños, la habitación no es únicamente el lugar donde duermen y descansan, sino que para ellos es un auténtico santuario. Por esta razón, en función de su edad, deberemos adaptar la habitación a sus necesidades específicas, atendiendo tanto a la decoración del espacio como a su iluminación. De hecho, es importante que estos dos aspectos vayan de la mano, ya que determinarán el resultado final de la habitación. A continuación, ofrecemos algunos consejos para escoger la iluminación infantil del cuarto de nuestros hijos.

Flexibilidad

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Uno de los aspectos que debemos tener en cuenta a la hora de elegir la iluminación de la habitación de los más pequeños es la flexibilidad de las lámparas que escogemos. En este sentido, debemos pensar tanto en la funcionalidad de la propia lámpara como en la edad del niño. Así, por ejemplo, una lámpara de pared puede ser adecuada para el área de descanso del cuarto. 

En cuanto a la intensidad, escogeremos una bombilla más o menos intensa en función de la edad del niño. De este modo, si nuestro hijo es pequeño, lo mejor será optar por una luz poco brillante para que pueda conciliar mejor el sueño. Por el contrario, si el niño es un poco más mayor, podemos elegir una iluminación más intensa para potenciar la realización de actividades como la lectura.

Seguridad

Otro de los aspectos que deberemos valorar a la hora de elegir la iluminación infantil es la seguridad de las lámparas que adquirimos. Por ello, cuando compremos una lámpara, deberemos preguntar por el origen del producto y por si este cumple los estándares de seguridad europeos. En principio, deberíamos adquirir solo luminarias que cumpliesen con estos estándares.

Tonalidades

Cuando vayamos a elegir la iluminación de la habitación de nuestros hijos, también deberemos tener en cuenta los colores del cuarto, para así potenciarlos gracias a las lámparas elegidas. De esta forma, si la habitación tiene colores cálidos, lo mejor será optar por bombillas clásicas, mientras que, si los colores son fríos, las soluciones LED pueden potenciar la sensación de limpieza y frescura. Además, si lo que buscamos es ahorrar, la mejor alternativa serán, sin duda, las bombillas LED.

Información

Antes de comprar una lámpara infantil deberemos obtener toda la información posible sobre el modelo que nos interesa: la longitud, el ancho y la altura. De la misma manera, también deberemos preguntar por el tipo de bombilla que podremos colocar en ella. En este sentido, deberemos averiguar, asimismo, el tipo de zócalo o hilo, la potencia y el voltaje.

Quitamiedos

Como hemos mencionado anteriormente, una cuestión que se debe tener en cuenta es la necesidad que cubrirá la lámpara que compraremos. De este modo, si, por ejemplo, nuestro hijo tiene terrores nocturnos, podremos adquirir una lámpara quitamiedos para que se sienta más acompañado durante las noches.

En este sentido, contar con una lámpara quitamiedos en la habitación puede otorgarles una sensación de seguridad que no tendrían con todas las luces apagadas. Además, estas lámparas no solo ayudarán a dormir mejor al niño, sino que también mejorarán la decoración de su cuarto.

Luz puntual

Nuevamente, atendiendo a las necesidades de nuestros hijos, es posible que necesitemos una luz puntual en algún espacio de la habitación. De este modo, tendremos que valorar el tipo de actividades que desarrolla nuestro hijo en su habitación, para saber qué tipo de luminarias necesitaremos.

Así, si el niño ya es mayor, es probable que necesite un espacio bien iluminado para hacer los deberes. Por ello, la zona de la mesa de estudio deberá contar con una lámpara especial, tipo flexo, que le permita trabajar cómodamente.

Por el contrario, si tu hijo todavía es un bebé, quizás te convenga tener un aplique de pared en la zona del cambiador, para todas las veces que tengas que cambiarlo de noche. En este caso, deberás optar por una luz muy tenue, que no desvele al bebé mientras lo cambias.

Lámpara de techo

La lámpara de techo seguramente sea la luz más importante, puesto que es la que aportará la iluminación general a la habitación. Para seleccionar la lámpara de techo, la regla general que deberíamos seguir es que esta debe aportar una luz cálida e intensa, que permita ver sin dificultades. En este sentido, nuestra recomendación es, nuevamente, optar por lámparas de tipo led, que son más sostenibles y que generan un consumo energético menor.

Con respecto al diseño de la lámpara, todo depende de la decoración del resto de la habitación. Así, por ejemplo, a algunos dormitorios les quedarán bien lámparas románticas tipo chandelier, mientras que en otros casos quedará mejor elegir otro tipo de colores o diseños. De esta forma, si lo que se quiere es algo discreto, se puede optar por una lámpara sencilla de tonalidades blancas o muy claras. En este caso, el diseño no será infantil, pero quedará de maravilla en cualquier habitación.